'Despues de la tormenta, ¿Siempre sale el sol?' « Parte 2.Corto Laliter »

Parte 1: http://siemprepartedemi.blogspot.mx/2015/02/no-era-para-siempre.html

Había vuelto a Buenos Aires después de esa noche tan…bueno, después de esa noche. Candela toco a mi puerta dos minutos después de que le avise que ya estaba en casa y que, esto iba en mayúsculas, no quería ver ni hablar con nadie. Pero aun así fue, como siempre estuvo sin estar; Fue mi pañuelo de lágrimas y mi punching bag. Se la banco como siempre se la ha bancado. Euge me mando un mensaje donde decía que teníamos junta con los teens en una semana, que había algo importante que tenía que decirnos. No le di mucha pelota, el tan solo pensar que él iba a estar ahí me hacia volver a derramar lagrimas y abrazar la almohada. ¿Cómo lo voy a ver después de lo ocurrido? ¿Cómo voy a hacer como si nada pasara después de que todo pasó? ¿Cómo? Esas preguntas me mareaban de una forma increíble.

Él es la persona con la que siempre soñé pasar mi vida, y ahora tengo que aprender a vivir sin él. Como lo voy a hacer, eso aun no lo se.

Ya era domingo por la noche, durante todos los días pasados habia recibido mensajes de mi familia, preguntándome que si donde estaba, que si se habia arreglado todo con Peter, que si pensaba ir al asado del sábado, ayer, que si estaba bien. No conteste ningúno. Mensajes de Candela, de María y de Yanet preguntándome por los planes del finde. No conteste ninguno. De Mariano Demaria avisándome de la junta de mañana. De Nicolás y de Gaston diciéndome que ya sabian todo lo que habia pasado. Y, este es el que menos esperaba, de Benjamin Amadeo, diciéndome que ya se habia enterado de lo ocurrido y que lamentaba con todo el corazón que él tuviera la culpa, que iba a hablar con Peter para aclararlo todo. Ese si lo conteste…

No hagas nada. Demasiado hiciste ya.

Medio botecito de corrector de ojeras fue a parar debajo de mis ojos. Creo que hoy fue el único dia en que puse tanto maquillaje en mi cara. Ropa negra para ocultar todo lo que habia adelgazado la ultima semana, y una cartera enorme. Sali de mi apartamento con mis lentes de sol puestos.

Te estamos esperando

Me llego ese mensaje de Eugenia. Suspire y mire el reloj, ya iba cinco minutos tarde gracias a todo el maquillaje. Gracias a Benjamín Amadeo.

Conduje por encima del límite de velocidad que se debe mantener en la ciudad. No sé porque iba tan rápido, no sé porque quería llegar ya.

Lo peor es que si se; Es porque él esta allá. Seguramente está mirando el reloj, desesperado, y revoleando los ojos. Es lo que usualmente hace cuando alguien es impuntual.

Gorda, acorda de poner la alarma dos horas antes, eso lo que necesitas para prepararte y no dejarme esperando como un boludo en el restaurant.

Me decía siempre que llegaba tarde a algún lugar.

Una lagrima se deslizo por mi mejilla, arruinando el rímel y dejando una marca negra a través de mi mejilla.

Estacione y baje. Me arregle la cara. Suspire y entre. Todos los presentes; Eugenia, Nicolás, Gaston, Mariano Demaria, Pablo Tomaselli, Anita Tomaselli, Vanesa Pellizzeri (La RP de Peter, Gaston y mia), y Fran Largia (El RP de Eugenia) y Peter, me miraron. Intente sonreírles.

-Dale, China, ya estamos todos, apura –Le pidió Peter, que dejo de mirarme cuando vio que la que entro por la puerta era yo-

-Bueno, si. Emm…me voy de Teen angels

-¿Cómo que “Te vas de teen angels”? –Le pregunto, otra vez, Peter, incrédulo-

-Si, eso, me bajo de la banda

-Eugenia, no podes –Le dijo Nicolás, que hasta ahora habían llevado una relación “Hola. Hola”-

-Claro que puedo. Seguía en la banda por el programa, y ahora que el programa termino… -Se encogió de hombros-

-Si, te entiendo –Le dijo Gaston, comprensible como siempre-

-Bueno, yo no te entiendo, pero te banco –Le dijo Peter-. Ahora el problema va a ser como reemplazarte, ¿No? –Bromeo-

-Les tengo a una persona que me parece que da el talle –La miramos, expectantes- Rochi

-¡¿Rochi?! –Dijimos al unisonó-

-Si, Rochi. Siempre le ha gustado la banda, y sabe de música, y sabe cantar

-Sí, pero… ¿Rochi? –Dijo, aun incrédulo, Nicolás-

-Si, Rochi. No dijiste nada, Lali –Me miro-

Suspire. Había quedado muda después de su declaración. No sé si porque me la esperaba o porque sentía que el que este Peter presente iba a provocar que dijera dos palabras y me largara a llorar.

-Emm… bueno, no hay mucho que pueda decir, vos te vas, me lo imaginaba, no fuiste mucho de esto y…-Negué. No porque ya no tuviera nada que decir, sino porque mi voz estaba empezando a temblar-

-¿Todo bien entonces? ¿Ningún resentimiento?

-No –Dijeron Nicolás y Gaston, juntos. Yo negue mirando al suelo-

-Sabia que entenderían. Y enserio consideren a Rocio, ella es lo mas. –Asentimos- ¿Una ultima cábala?

Nos pregunto, refiriéndose a unir nuestras manos y gritar “Uno…dos…tres…cuatro…cinco… ¡Eh!” Los chicos se levantaron y se unieron a ella, cuando me levante, unos segundos despues de ellos, me maree y me tuve que volver a sentar.

-¿Lali, estas bien? –Me pregunto Gaston y asentí, agarrándome la cabeza-

-Ya vengo

Les dije y corri, literalmente, al baño. Puse el pestillo y me agarre del lavabo de cristal. Me quite los lentes y me mire al espejo.

Con los ojos llenos de lagrimas a punto de rebalsar, el puchero y las mejillas rojas. ¿Tan mal me veo? ¿Qué pensaron los otros de mi?

Abro la canilla y dejo que una buena cantidad de agua llene mis manos, la arrojo hacia mi cara, salpicándome toda la remera, y con una toalla que esta sobre la mesada de granito, me seco toda la cara, el maquillaje se fue con el agua. Me mire al espejo de nuevo; Esta soy la verdadera yo despues de Peter. Mis mejillas tenían un aspecto chupado, mis ojos y mis labios se veian demasiado grandes para mi rostro.

Y de nuevo mis ojos se llenan de lagrimas.

¿Por qué todo se tuvo que terminar? ¿Por qué hice eso? ¿Por qué, en lugar de irme a ese descampado, no me fui con él a cenar con su familia? ¡Yo amo a su familia, Dios!

Y de nuevo las palabras de Tincho resuenan en mi cabeza “Peter y vos se pueden amar y todo lo que quieran, pero no funcionan juntos, ¿Entendes?”

Y se que tiene razón, pero yo quiero funcionar con Peter, quiero que funcionemos. Y se que ya no habrá una segunda oportunidad para intentarlo. Se termino. Para siempre.

“Se termino” Cada vez que recuerdo esas dos palabras es como si un cuchillo se clavara cada vez mas en mi corazón, haciendo una herida que no sanara nunca. O al menos así se siente.

*Toc toc* Ese ruido me hace levantar la cabeza. Miro hacia la puerta y la cabeza de Gaston se asoma, su gesto cambia al verme…así.

-Hey, peti –Y corre a abrazarme-

-Gas, no puedo mas

Le dije cuando pude hablar, despues de deshacerme de lagrimas en sus brazos.

-Ay, petiza –Me dijo, lastimero, acariciándome la espalda de arriba abajo-

-No digas nada, por favor –Le pedi. Asintio-

Estuvimos ahí adentro hasta que Eugenia le mando un mensaje a Gaston diciéndole que ya podíamos salir. Ella sabe bien porque es que corri hacia el baño.

-No, ya, veni –Me dijo cuando miro que estaba sacando el maquillaje-. No importa, te hemos visto peor

Mientras saliamos, me recargue en él y apoye la mejilla en su hombro. En el lugar solo estaban Pablo Tomaselli, Anita y Mariano, que me miraron sonriendo lastimeros.

-¿Era todo lo que nos tenia que decir Eugenia? –Le pregunte, asintieron- Entonces ya me voy

-Esta bien, pero ¿A ustedes como les viene Rocio como nueva integrante?

-Por mi esta bien –Dijo Gaston, aun con el brazo en mi cintura. Ellos eran mejores amigos, incluso se llamaban Bichito de luz-

-¿Vos, Lali? –Asenti, incapaz de hablar- Entonces nos vemos pronto, ya se les avisara todo por correo, o llamada ¿Si? Estén atentos –Asentimos-

-¿Queres ir a comer? Te falta comer –Me dijo Gastón, retándome con su voz-

-No, quiero ir a mi apartamento

-Lali…

-No, Gas. Quiero ir a mi apartamento, ¿Está bien? Si necesito algo, te llamo

-Lali, no es sano que estés así

-Gastón, no necesito a alguien que me cuide, ya soy grande

-No te pienso decir más nada entonces

-Gracias. Adiós

Me solté de su agarre y camine hasta el auto. Enserio me sentía débil, la cabeza me estaba matando. Decidí que comer algo no me iba a matar, pero no iba a ser algo sano. Me detuve en el primer McDonald’s que me tope en el camino. Dos Big Mc grandes, refrescos grandes y papas fritas grandes, junto con un sundae de chocolate, me acompañaron de vuelta a casa. Y no, no pensaba invitar a nadie a comer, solo que cuando mire el menú y mis tripas empezaron a rugir muy alto, me di cuenta que con solo una hamburguesa no iba a ser suficiente.

Lali Esposito @laliespos

Hola! Como andan por acá?

Escribí en twitter. Me senté frente al televisor a ver el programa de Susana Giménez, mientras comia. Muchos saludos de las fans, muchos comentarios preocupados que si por que no habia entrado, muchas laliters diciendo que ya sabian que nos habíamos separado con Peter, muchas personas preguntando que si era verdad lo que decían sobre Benjamin Amadeo y yo.

Peter Lanzani y… ¡Brenda Asnicar!

Mire la televisión. ¡¿Qué?!

¿Esto esta chequeado, chicos?

Les preguntaba Susana a los técnicos, supongo.

¡¿Qué?!

Apague la televisión.

¡¿Qué?! ¿Con Brenda Asnicar? ¡Brenda Asnicar! Pero por favor… ¡Basta, Mariana!

Lali Esposito @laliespos

Día de junta, día de McDonald’s y día de escuchar rumores desagradables!! #quedia

Así queda todo contestado. No a lo de Benjamín y yo. No a lo de Peter y Brenda Asnicar. No a lo de Eugenia dejando la banda. No a Rocío reemplazándola. No.

Y como soy muy yo cuando menos deberia ser yo, le mande un mensaje a Pedro. Si, Pedro. Porque ahora estoy muy enojada con él. Ironico.

Estas con Brenda Asnicar???!!! TAN RAPIDO ME REEMPLAZAS?!!? Y CON BRENDA ASNICAR?!! JA ME DAS RISA LO BAJO Y POCO HOMBRE QUE SOS

Di enviar y suspire.

¿Qué hice?

¿No hay una tecnología que regrese los mensajes, no?

¡Mierda!

No sos nadie para pedirme explicaciones, Mariana.

Leía una y otra vez el mensaje, mientras caía de nuevo en ese agujero hondo que era la lastima y la auto compasión.

No sos nadie.

Nadie.

Mariana.

Una persona muy sabia una vez me dijo “El dolor es inevitable pero el sufrimiento es opcional” pero no siento que ahora sufrir sea opcional, siento que no puedo hacer nada para no sufrir. El cuchillo cada vez se clava mas y mas profundo en mi corazón. Y tengo miedo de que llegue tan lejos que no lo pueda sacar nunca.

Me intente hacer la fuerte, enserio que si, entrar a twitter despues de tanto tiempo, comer, mirar televisión…esos eran mis intentos de avanzar, pero solo bastaron tres palabritas para volver a la tristeza.

Me merezco estar así, porque se que Peter sufrió por algo que no tendría que haber sufrido. Ni siquiera yo tendría que estar sufriendo. Tendria que estar en casa de los Lanzani por el cumpleaños de Bautista, junto a Peter. Ese es mi lugar, junto a él.

O al menos ese era.

Y ahora tengo que juntar todos los pedacitos de mi para poder ser algo parecido a lo que era antes. O al menos intentarlo. O al menos fingirlo. O a menos…bueno, ya veremos.

Dos años después

Córdoba, Capital. Orfeo. Ocho de Octubre 2012.

Todo estaba listo para el último concierto de El Adiós de Teen Angels. A todos nos pareció que ya era suficiente, que teníamos que crecer, que tomaríamos diferentes rumbos a partir de hoy.

-¿Listos? –Nos pregunto Mariano cuando se asomo al pasillo que conectaba los camerinos. Nos miramos, y lo miramos- ¡Vamos a ponerle garra, vamos!

Nos levantamos de los sillones, nos reunimos en el circulo en el que estaban todos los músicos, maquilladores, vestuaristas…Anita Tomaselli, Pablo y Mariano, ¡Vinieron Cris y Leo Calderone!

-¡Uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis….-Continuamos hasta el veinte- EH!

-¿Vamos a ponerle garra? –Pregunto Nicolás ya mas eufórico-

-¡Vamos a ponerle garra! –Le contestaron Rochi y Gaston a los gritos-

-Veni, petiza –Me tomo Peter del brazo y me rodeo el cuerpo-

Nuestra relación había mejorado considerablemente. Ahora éramos “amigos”, si, entre comillas porque no podemos ocultar las ganas que nos tenemos, por más que queramos.

-Te quiero mucho, La –Susurro en mi oído. Su aliento caliente acariciando mi piel; Gloria-

Bese la parte trasera de su oreja y senti bajo mis labios como se le erizo la piel.

-Te quiero mucho, Pi

Nos separamos y lo mire a los ojos. Era como si una burbuja se hubiera formado a nuestro alrededor. Era como en los viejos tiempos, solo él y yo.

No habia pensado en los viejos tiempos tanto como hubiera querido. Entre mi vida social, la laboral y el tiempo para mi, me consumía. Habia relegado tanto mis sentimientos que se habían quedado refundidos en lo mas profundo e hinospito de mi ser. No les prestaba atención porque sabia que despues de Peter, aun no habia llegado el hombre que me hiciera flaquear las rodillas, como lo hacia Peter. Como lo hace Peter.

-Eh…chicos, ¿Vamos?

Nos pregunto Gaston, sacándonos de nuestra burbuja. Lo miramos y asentimos, pero no nos separamos. Caminamos hacia el escenario, yo con mi mano en su cintura, y él con su brazo rodeando mi cuello. Nos miramos una ultima vez y empezamos la fiesta que era el ultimo show.

El ultimo show.

Lagrimas mezcladas con risas, mezcladas con nostalgia, con tristeza, con ansiedad, con recuerdos, con gritos, con nervios del futuro. Vitoreós y canticos que se mesclaban entre si. Miramos el panorama mientras no abrazabamos en línea recta; Carteles de diferentes colores, algunos decían cosas que te hacían soltar una lagrima, otros te hacían estallar de carcajadas, otros recordar. Mirar a todas esas personas frente a nosotros, que tambien lloraban, nos sonreían con lagrimas en las mejillas. Y nos miramos nosotros, sabíamos que despues de hoy todo iba a cambiar, tal vez no por un año, pero cambiara, y nos rehusamos a eso. Las mejillas de los cinco estaban inundadas en lagrimas, nos sonreíamos con los ojos rojos. Fue en el momento en que Peter beso mi cabello, que el teatro se lleno de gritos. Todos estallamos en risas y carcajadas gruesas.

Dijimos palabras que nos volvieron a hacer llorar y el telon se bajaba. Abrace a Peter y él me rodeo con sus brazos. Me niego a alejarme de él. Me rehuso. Me lo prohíbo.

-Ya, ya, veni

Me condujo hasta detrás del escenario, por el pasillo, hasta su camerino con Nico, cerro con pestillo e hizo que me sentara en sus piernas. ¡Si! Extrañaba con el alma estar así con él. Habiamos pasado todo el concierto coqueteando. Ambos sabemos que no queremos estar mas separados, solo hace falta que uno de el primer paso.

-Los voy a extrañar mucho –Dije, con la voz ahogada en lagrimas-

Él me miro con ese gesto suyo que representa tristeza, tan característico; Cejas bajas y asintiendo.

-Yo tambien, linda, pero no vamos a ningún lado, estaremos viéndonos cada tanto y…-Negue, me seque la nariz con el dorso de la mano- ¿No, que?

-A vos no quiero verte cada tanto, Peter

-Lali…

-¡Si ambos sabemos lo que queremos, ¿Por qué no nos animamos?!

-¿Y si ahora si se caga todo? ¿Si se caga todo otra vez? ¿Y si ahora si cuando todo se cague no nos podemos ni ver?

-Yo me muero sin vos, Peter

-Lali…

-¡Decimelo!

-No esto…

-¡Peter!

-¡Y yo me muero sin vos, mi amor! ¡Ya! No sabes lo que era despertar todos los días con el miedo a que en las noticias dijeran que te vieron con un tipo a los besos, me muero si estas con alguien que no soy yo –Negue-. Vos sos mia

-Para siempre, si, mi amor

Me acerco la nuca furiosamente hacia él y me beso, hizo que nuestros labios chocaran, e ignoramos el dolor. Me acomode a horcajadas sobre él y suspire sobre su boca, mordió mi labio inferior y jalo. Acaricio mi piel debajo de mi remera. Sus labios hicieron un camino desde mi boca hasta mi cuello, y de regreso.

-¿Entonces? –Le pregunte con la voz agitada-

-Si vuelves a hacer lo mismo, se termino. Esta vez para siempre. ¿Estamos?

Lo obligue a que me mirara a los ojos, tenia los labios hinchados. Seguramente los tengo igual.

-Te amo, ¿Si? Te amo a vos y solo a vos. No quiero a nadie que no seas vos. Solo vos, para siempre.

-Vos y yo, para siempre

-Para la eternidad

Asintió y lo volví a besar.

Para siempre.

Cinco años después.

-La pareja mas querida de Argentina ¡Y del mundo! ¡¡SE NOS CASA!! Si, así como lo oyó; Lali Esposito y Peter Lanzani ¡Se casan! Hace mucho lo sospechamos, ella tenia un anillo de compromiso. Pero anoche, en la gala de GENTE, llegaron juntos y nuestros reporteros le hicieron la pregunta, vamos a verlo

Deje de cambiarme y mire la televisión. Peter estaba recargado en el respaldo, mirándome.

-Hola, Lali. Hola, Peter –Saludo el reportero con el micrófono de TLF­-

-Hola –Lo salude y Peter le sonrio-

-¿Cómo estan?

-Muy bien, ¿vos? –Dijo Peter-

-Bien, bien. Queremos preguntarles, ¿Ese anillo que tiene Lali, es de compromiso? –Pregunto mirando mi mano. Nos miramos y sonreímos-

-Si, estamos comprometidos –Conteste, sonriendo-

-¿Hace cuanto?

-Hace un tiempo ya –Le dijo Peter, sin decir mucho-

-Pues, felicidades. ¿Cuándo la boda?

-Todavia falta mucho. Gracias –Le dijo Peter. Lo mire sonriendo-

-Y esos fueron Peter y Lali. ¡Felicidades, chicos, los ama…!

Peter apago la televisión y puso el control sobre la mesita de luz.

-¿Queres que salgamos a comer? –Le pregunte y me puse los zapatos-

-Si, paso por vos –Asenti-

-¿Me das un beso?

-Diez te doy, mi amor

“Mi amor” amo demasiado que me diga así. Porque se que soy suya, para siempre.

Un año despues

-¿Y usted, Mariana Esposito, acepta a Juan Pedro Lanzani como esposo, para cuidarlo en la salud y en la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza, hasta que la muerte los separe?

Mire a Peter, tenía los ojos brillosos. Di un apretón a su mano y sonreí.

-Acepto –Dije con un hilo de voz-

-Entonces los declaro marido y mujer, que lo que Dios ha unido hoy no lo separe el hombre. Puede besar a la novia

Y si. Después de la tormenta más fuerte, sale el sol. Siempre sale el sol.